Aprovechamos y con la “ karcher” limpiamos a fondo la cubierta que quedó como nueva, pero teníamos ganas de probar el motor y esperamos a que amainara el viento y la mar, lo que suele suceder al final de la tarde, y así fue. Salimos con algún que otro roción y el ruido, nada de nada, no existía, el barco navegaba perfecto.
El sábado 21 quedamos Juan y yo para salir a vela y “airearlas”. Día perfecto de sol, mar de fondo que aún quedaba del día anterior y con 8 Ktn de NE que se estableció. Disfrutamos como dos chiquillos durante cerca de tres horas con música, sol, cervecita y por supuesto un curricán para pescar la comida del día. Menos mal que en casa estaba preparada porque lo que se dice pescar, pues nada (miento: un plástico).
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¡Hey! ¿Tienes la licencia de pesca al día? ;-)
ResponderEliminarNosotros ya la hemos conseguido, ahora hace falta estrenarla con alguna que otra captura, que el plástico y el avicuécalo parecen los únicos trofeos que conseguimos en el club...
Me gusta tu blog, ánimo con él, y ya nos iremos contando cositas...
Hola, desde la lejana Bruselas :)
ResponderEliminarQué envidia me das - daría cualquier cosa por navegar estos días en el Mediterráneo y pescar aunque sea algun plástico!
Me gusta tu blog y me encantan las fotos.
Judit